¿Contención en redes sociales de Tres Pesos?

Pregunta:

¿Qué daría más valor de marca a una empresa
en el supuesto que uno de sus colaboradores
se convirtiera en un “lord” o “lady” en redes sociales?

  • a) Despedir a la persona.
  • b) La integración de la persona a un proceso de sensibilización del tema. Y hacerlo público.
  • c) No hacer nada.
  • d) Hacer que pida disculpas en medios digitales.

Si bien la relación de trabajo entre una empresa y una persona no implica que pueda tener injerencia en la vida de sus colaboradores. Surgiría la pregunta de ¿qué tanta responsabilidad tiene una empresa en el comportamiento de sus colaboradores?

¿Si la empresa despide al “negrito en el arroz” se deshace del problema? O simplemente está cerrando los ojos ante una realidad que le compete también como una personal moral que forma parte de la sociedad.

¿Cómo sabremos si personas con el mismo perfilado de puesto se encuentran laborando en dicha empresa?. Hasta dónde llega el nivel de compromiso que hace evidente la empresa no solo con los clientes, sino con sus propios colaboradores, porque si a esas vamos, cualquier persona en cualquier momento (por causa del estrés, una urgencia médica o personal (Ej. La incapacidad de dejar a su hija en el auto a solas) podría verse expuesto.

El suceso en redes sociales tendría la misma dimensión y repercusión si fuera ejecutado por un colaborador de cierto rango a que si lo hace un directivo clave o un socio de la misma empresa.

¿Cómo cambiaremos como sociedad si al menor esbozo evadimos como empresa responsabilidades -que si bien no nos competen- dados los tiempos que estamos viviendo en el que deberíamos tomar?

De qué sirven las misiones, visiones y valores pegados en las paredes y supuestas guías de conducta interna. Si en el instante que nos quitamos la camiseta o el gafete volvemos a dejarnos llevar por la naturaleza de los momentos. No sería mejor entonces reevaluar nuestros “leit motifs corporativos” para que incluyéramos a todos los seres humanos ( y no solamente con los que hacemos negocio o los que nos dejan dividendos) para que entonces sí las personas morales fueran también agentes del cambio. Sí de esos que el mundo necesita.

¿No podría salir una campaña de responsabilidad corporativa de ese hecho? Si tu empresa se dedica a vender casas (por ejemplo) no vendes también espacios para la convivencia humana. Y esa convivencia implica que sepas hablar con el otro. Ergo: “Un espacio para conversar” no podría ser el lema de tu campaña de sensibilización.

Cuestión:
Sobre la responsabilidad corporativa en relación al comportamiento de sus colaboradores en esta nueva realidad.